El crash Istanbul Agop Turk de 18” ofrece una respuesta seca y cruda, con un sonido sucio y un decaimiento rápido. Cada plato turco es una obra de arte, trabajado a mano por artesanos expertos. Las variaciones en color, marcas de martilleo, ranurado y etiquetas son detalles que aportan a la belleza natural, el sonido y la calidad única de estos platos incomparables.
IMÁGENES REFERENCIALES